El puente sin nombre en el barrio checo de Velkoprevorske Namesti se encuentra sobre un pequeño arroyo. El puente es pequeño pero conserva un molino de agua mucho mayor que avanza suavemente con el transcurso del rió.
Nadie, probablemente, excepto la pareja que lo pusieron allí, sabe cuándo apareció por primera vez el candado. Se comenzó a extenderse esta tradición a lo largo de los barrotes del puente.
Praga es una de las nuevas ciudades europeas en hacer esta tradición, y la mayoría de los candados del puente son del 2010. Pero es una tendencia que ha sido progresiva en las ciudades de Europa como por ejemplo en ciudades como Londres, París, Roma, Bruselas, Estocolmo, Kiev, Rotterdam, Liubliana, Copenhague y Moscú. Y desde entonces se han extendido aún más, a Guam, a Taiwán, Corea del Sur, a Japón, y Australia.
Aunque los antiguos chinos fueron los creadores originales del candado del amor, el movimiento que se está envolviendo Europa comenzó en Pécs, Hungría, en la década de 1980. Los estudiantes comenzaron a colocar cerraduras de una valla cerca de la Universidad de Pécs.
Como no,nosotros también dejamos nuestro candadito del amor.
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