La Basílica de Santa Maria Maggiore se considera el monumento más importante de la ciudad de Bergamo,encontrandose en la parte alta de esta.
La misma ubicación denota la importancia de este edificio de culto en la ciudad. Piazza Duomo fue durante mucho tiempo, hasta la construcción de la cercana Piazza Vecchia, el centro de la vida civil y religiosa de la ciudad.
La basílica ha conservado en el exterior la estructura románica originaria desde que fue construida en el siglo XII, por voto a la Virgen. La estructura es de cruz griega, pero el interior, modificado en el año 1500 y en el año 1600, se presenta un poco suntuoso. Han trabajado en ella muchos artistas: lombardos, vénetos, toscanos y también extranjeros. Hay dos entradas para la basílica adornados con espléndidos pórticos de mármol policromos obra de Giovanni da Campione (1353-60).
En el interior hay varias obras de gran valor e importancia. Los bancos del coro y las taraceas del iconostasio, que representan historias bíblicas, se hicieron entre el año 1524 y el 1555 por los maestros talladores G. F. Capoferri y G. Belli.
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